Las claves del mal momento de Argentina
La selección Argentina ha generado más dudas que ilusión en la fase de grupos de la Copa América. Estas son las claves del mal momento por el que pasa.
Dependencia de Messi
La mera presencia de Leo Messi le hace tanto bien como mal al conjunto. "El 10" se echa el equipo a la espalda y lidera a un grupo de jugadores falto de nivel y confianza. Es lógico que sus compañeros busquen a su mejor jugador, pero en los últimos años en la selección hay obsesión y exigencia de que Messi lo haga todo. No en pocas ocasiones hemos visto a Leo coger el balón en su propio campo y tener que correr hacia adelante frente a un muro de rivales porque sus compañeros no le hacen ningún apoyo. Por supuesto que Messi debe tirar del carro y contar con él es un lujo, pero sin apoyos y sin distribuir las tareas, jugando a esperar que obre un milagro, será mucho más difícil explotar su potencial.
Falta de calidad
Es una obviedad que este plantel no le llega ni a la suela a la gran mayoría de generaciones argentinas que hemos visto. Los Zanetti, Ayala, Pochettino, Verón, Redondo, Crespo, Aimar, Riquelme, Batistuta o Simeone están muy lejos de los Renzo Saravia, Juan Foyth, Rodrigo De Paul, Pezzella, Milton Casco, Guido Pizzarro, Guido Rodríguez, Funes Mori o Marcos Acuña. Salvando la delantera, la selección argentina se compone de jugadores locales -y tampoco jóvenes precisamente- y jugadores de equipos medianos de Europa. Apenas Agüero, Lautaro, Messi, Dybala y Di María juegan en un equipo de primer nivel con aspiraciones a ganar todo.
Bloqueo psicológico
Los jugadores de la selección argentina han acusado siempre un desgaste psicológico descomunal desde siempre. La afición es hiper exigente y crítica y no deja pasar ni un error. La presión se acentúa si los jugadores no están al nivel, por lo que este grupo siente tal tensión que se les nota bloqueados a la mínima de cambio. Ya se vio ante Paraguay y Colombia como al primer revés el equipo se va a la lona. A la selección Argentina le falta confianza.
Entrenador sin experiencia
Ni Scaloni sabe bien cómo ha acabado en el banquillo de la selección. Comenzó dirigiendo a la sub-20 y tras la renuncia de Sampaoli se quedó con el banquillo de la absoluta pese a no tener experiencia a primer nivel. Así pues Lionel Scaloni acabó siendo el elegido para llevar a cabo un proceso de reestructuración con la selección, pero sus decisiones están siendo muy cuestionadas. Argentina necesita a un técnico de élite para buscar soluciones a los grandes problemas que acusa, y un Scaloni en plena formación no hace más que ir cambiando piezas sin mucho sentido.