Abran el armario y seleccionen su ropa más elegante, comienza el evento del verano en Inglaterra. El All England Lawn Tennis and Croquet Club acoge desde 1877 el único Grand Slam disputado sobre césped, el Campeonato de Wimbledon, que rebosa tradición y costumbres por los cuatro costados.

El torneo más antiguo del mundo no ha perdido ni una pizca de su esencia a lo largo de los 142 años en los que se ha disputado, siendo un buen reflejo de la idiosincrasia inglesa. Son muchas las tradiciones que hacen de Wimbledon un torneo muy especial.

Si llegamos muy temprano al All England Club lo que nos encontraremos será… la puerta cerrada. El torneo abre sus puertas con puntualidad británica a las 10:30 de la mañana. Para conseguir una entrada primero hay que enfrentarse a "The Queue", ya que la primera gran tradición son las larguísimas colas en la puerta para entrar al recinto.

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Seguramente lo que más llama la atención de un partido de Wimbledon son los atuendos de los jugadores. Todos deben ir de blanco impoluto debido al estricto código de vestimenta que impera en el torneo. Esta norma no es flexible y a lo largo de la historia hemos visto bastantes anécdotas, como la de André Agassi negándose a competir durante 1988 y 1990. La grada también tiene su propio código de vestimenta y los espectadores deben acudir vestidos "de forma elegante".

La hierba de la pista se siembra en abril, y desde mayo ya está cortada a esos 8 milímetros exactos. Ni uno más, ni uno menos. Sobre esa pista botarán las pelotas de tenis de Slazenger, marca que suministra las bolas al torneo desde 1902. El silencio es sepulcral en las pistas, Wimbledon es el torneo en el que menos se debe recordar a los espectadores que guarden silencio. Tampoco encontraremos vallas publicitarias.

El primer domingo, llamado "Middle Sunday" no se juega, a no ser que no quede otra debido a las lluvias, como ya ha ocurrido en alguna edición. También tiene sus propias normas en cuanto a organización deportiva. El campeón del año anterior estrena pista y tiene un sistema especial de clasificación. En los cuadros no aparecen Hombres ni Mujeres, sino que se encabezan con Damas y Caballeros. Por cierto, las jugadoras serán nombradas por Señora o Señorita dependiendo de si están o no casadas.

Pero es verano, el calor aprieta y de entre todas las tradiciones de Wimbledon nos quedamos con la de comer fresas con nata. Lejos de los fritos y aperitivos grasientos que encontramos en los recintos deportivos, en el All England Club se disfruta de fresas frescas bajo el sol de julio. Aquí está todo lo que tienes que saber acerca de esta tradición.