José Mourinho declaró una vez que la Champions League es la cúspide del fútbol porque, al contrario que la Copa del Mundo, los mejores clubes pueden comprar a los mejores jugadores del mundo.

Ciertamente, es el único torneo en el que han competido todas y cada una de las grandes estrellas del fútbol desde su creación en 1992.

Sin embargo, de todos los grandes que han jugado en el mayor evento del fútbol de clubes, ¿quién es el mejor?

Nuestros redactores –Tom Bowles, Tom Clee, Adam Drury, Jack Green y Will Rook– han querido responder a esta pregunta de una vez por todas.

Hay jugadores influyentes que nos vienen inmediatamente a la mente cuando pensamos en grandes equipos, como Xavi, Sergio Ramos y Kaká, estos jugadores tienen buenas puntuaciones en esta categoría.

Los jugadores a los que no les va tan bien en esta categoría son los que juegan roles menos importantes y quedan a la sombra de jugadores mejores de su equipo, como es el caso de Karim Benzema.

Sumando las cuatro categorías cada jugador obtiene una puntuación total, y utilizamos nuestro criterio para romper cualquier empate.

Así que aquí está: nuestra lista de los 50 mejores jugadores que han participado en la Champions League.

  1. THOMAS MULLER

Raumdeuter (sustantivo): interpretador de espacios, Thomas Muller.

Sin ser exactamente un delantero, ni tampoco exactamente un número 10, Muller inventó literalmente su propia posición.

En palabras del seleccionador alemán Joachim Low, es «un jugador muy poco ortodoxo» que es «inmune a la presión».

Esto se hizo evidente cuando, jugando en casa, se lanzó a cabecear en el área y adelantó al Bayern de Múnich en la final de la Champions League de 2012.

Fue un gol que finalmente no sirvió de nada, pero, teniendo en cuenta que volvió al año siguiente y ganó el trofeo, merece un puesto en esta lista. WR

  1. ERIC ABIDAL

El deporte normaliza el dolor físico y el sufrimiento, y es por eso que «metatarso fracturado», «rotura del ligamento cruzado» o «tendón de Aquiles roto» son consideradas frases comunes del fútbol, al igual que «defensa de patio de colegio», «partido decisivo» y «que le den al VAR».

Sin embargo, ocasionalmente, ocurre algo que es lo suficientemente significativo para recordar a los aficionados y a los comentaristas que los futbolistas son, además de atletas muy bien pagados, seres humanos.

En marzo de 2011, Abidal, el lateral izquierdo de preferencia del Barcelona, se sometió a cirugía después de que se le diagnosticara un tumor en el hígado. Es decir, que padecía cáncer.

Tres meses después, su club derrotó al Manchester United y ganó su segundo título de Champions League (y triplete) en tres temporadas.

Sorprendentemente, Abidal jugó los 90 minutos completos.

En reconocimiento por su regreso (recordemos que padecía cáncer), Carles Puyol cedió a Abidal el honor de levantar el trofeo el primero, un momento que el legendario capitán del Barcelona describió más tarde como el momento más especial de su carrera en el club. TB

  1. JAVIER ZANETTI

En palabras de Tío Bryn, el personaje de la serie Gavin & Stacey: «No importa cómo de viejo eres, sino la manera en que lo eres», y sin duda este es el caso de Zanetti.

El argentino estuvo 19 años en el Inter de Milán, 13 de ellos como capitán, pero son los últimos años los que le han granjeado un puesto en esta lista.

Zanetti llevó al Inter al triunfo en la Champions League de 2010 a la edad de 36 años, convirtiéndose en el segundo capitán ganador de mayor edad en la historia de esta competición.

La mayoría de los jugadores van retrocediendo en el campo a medida que envejecen, pero Zanetti fue una figura tan esencial en el Inter que pasó de lateral a centrocampista central en 2006.

Sin embargo, lo que quizás representa mejor la influencia de Zanetti es el rendimiento que ha tenido el Inter tras su retiro.

Solo ha participado en la Champions League una vez en cinco años desde que él colgó las botas. JG

  1. FERNANDO HIERRO

Cuando piensas en el Real Madrid de principios de los 2000, piensas en los Galácticos.

Zidane. Ronaldo. Figo.

Sin embargo, siendo también parte de aquel equipo lleno de glamour, Hierro no suele recibir el reconocimiento que merece.

Hierro fue un valor fijo en el centro de la defensa del Real Madrid durante 14 años y ganó la Champions League tres veces, una de ellas como capitán en 2002.

El español era también un excelente pasador en un tiempo en el que lo que se esperaba de los defensas centrales era enviar el balón campo abajo siempre que éste llegara a sus pies.

No tenía la gracia de Zidane ni los tiros libres de Roberto Carlos, pero era tan esencial para el equipo como ellos. JG

  1. ANDREA PIRLO

Si esta fuera la lista de los mejores jugadores de los últimos 30 años (o de las mejores combinaciones de peinado y barba), Pirlo aparecería obviamente mucho más arriba.

Pero no es el caso, y los momentos más icónicos del italiano tuvieron lugar sin duda cuando vestía la camiseta de su equipo nacional.

Sin embargo, su influencia en esta competición no debería subestimarse.

Jugó en cuatro finales en un periodo de 12 años y fue el eje creativo del AC Milan en sus triunfos de 2003 y 2007.

Pirlo se ganó una reputación como lanzador de penaltis de mente fría tras echar a Inglaterra de la Eurocopa 2012, y por ello su fallo en la final de 2005 contra el Liverpool ya apenas se recuerda.

Podría decirse que fue un Panenka en aquella final, aunque finalmente no haya obtenido un puesto más alto en esta lista.

Lo sentimos, Andrea. JG

  1. NEYMAR

Cuando alguien es habitualmente el centro de todas las conversaciones, no importa si por malvado, por héroe o como un apático punto medio, significa que algo se está haciendo bien.

El PSG compró a Neymar en 2017 para que los llevara a ganar la Champions League y, de momento, debido a su lesión, sus propios errores y los errores de los demás, el jugador ha fracasado.

Pero su leyenda en esta competición permanece.

En 2016, el brasileño orquestó la mayor remontada jamás vista en las fases eliminatorias, marcando en los minutos 88 y 91, antes de asistir a Sergi Roberto para que éste marcara el gol ganador en la victoria 6-1 del Barcelona contra el PSG (viniendo de un 4-0 en la primera vuelta).

Incluso dejando de lado su increíble habilidad, su capacidad de desenvolverse en los momentos cruciales (a diferencia de Lionel Messi, marcó cuando el Barcelona venció a la Juventus en la final de 2015) le asegura un puesto en el top 50, que podría llegar a ser más alto en los próximos años. AD

  1. ALESSANDRO NESTA

¿Con qué frecuencia se hace viral en las redes sociales un vídeo de un defensa?

Los aficionados del Liverpool deleitándose con una interceptación de Virgil van Dijk, quizás, o Phil Jones haciéndose daño en la cabeza y poniendo una mueca graciosa.

Así que la aparición en Twitter a principios de mes de una recopilación de dos minutos de las entradas y bloqueos de Alessandro Nesta, con 3.400 «Me gusta» y sumando, dice mucho.

El contenido no consiste solo en la gran labor del defensa, sino también en lo estético de la misma. Nesta apenas parece mancharse los pantalones al deslizarse para recuperar el balón, o tocar físicamente al oponente al robarle la posesión.

Ese estilo, junto con los resultados ejemplares, explica cómo ganó dos títulos de la Champions League y por qué siempre estará en cualquier lista de los mejores defensas centrales. AD

  1. DAVID BECKHAM

Es fácil olvidar que antes de que Beckham diera prioridad a la fama sobre el fútbol (lo que ocurrió cuando llegó al Real Madrid en 2003), era uno de los mejores jugadores.

Fue el jugador más destacado del Manchester United en la temporada 1998/99, en la que ganaron un triplete, incluida la Champions League. Proporcionó asistencias cruciales en los cuartos de final y en las semifinales, y fue el único que jugó acercándose a su pleno potencial en la final contra el Bayern de Múnich, tirando los dos córners en el tiempo añadido que hicieron que el partido pasara de fracaso épico a victoria increíble.

Estas actuaciones le llevaron al segundo puesto en el Balón de Oro de 1999, siendo Michaels Owen el único jugador inglés que ha superado ese puesto en los últimos 40 años. TB

  1. CASEMIRO

Casemiro no es el típico jugador del Real Madrid.

Los 20 fichajes más grandes de los blancos han sido jugadores de pensamiento previsor, y Xabi Alonso, su jugador defensivo más caro, no era precisamente un tipo duro que se arremangara y se lanzara a la acción.

Así que cuando Zinedine Zidane necesitó un centrocampista para complementar a Luka Modric y Toni Kroos en las últimas fases de la Champions League 2015/16, el brasileño, que había sido cedido al Porto un año antes, tuvo que ocupar el puesto.

Y demostró ser más que adecuado.

Si se elabora una lista de jugadores sin los que el Real Madrid no habría podido ganar tres títulos europeos consecutivos, Casemiro debe aparecer cerca de los primeros puestos.

Su determinación, trabajo duro y entrega desinteresada no son rasgos tradicionales en el Real Madrid, pero son necesarios en un equipo que ha hecho de ir saliendo del paso una costumbre.

Sus tres títulos son una recompensa por estos esfuerzos inesperados. AD

  1. WAYNE ROONEY

Rooney ganó la Champions League en 2008, pero fue en dos partidos, uno en el torneo del año anterior y otro en el del siguiente, ambos contra el AC Milan, donde quedaron retratados los dos puntos álgidos de su carrera.

El primero fue en la primera vuelta de la semifinal en Old Trafford en 2007, en la que marcó dos brillantes goles de última hora que reafirmaron su estatus como rival de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo como talentos más prodigiosos del mundo.

El segundo fue en un partido eliminatorio en el San Siro dos años después, en el que Rooney marcó dos goles de cabeza y el United ganó 3-2.

Si bien no consiguió mantener el ritmo de Messi o Ronaldo (y no hay nada vergonzoso en ello) fue, en aquella temporada 2009/10, el mejor delantero centro de Europa. TB

  1. KEYLOR NAVAS

El curioso caso de Keylor Navas, el portero que por accidente casi se convierte en ganador de la Champions League por partida triple.

Bueno, no exactamente.

Pero si el Real Madrid se hubiese salido con la suya, y hubiera tenido una máquina de fax completamente operativa, sería David De Gea quien gozaría de tales honores.

Fichado originalmente como reserva de Iker Casillas después de la Copa del Mundo de 2014, Navas tomó el puesto titular tras su marcha y el fracaso del movimiento de De Gea el año siguiente.

Que fuera capaz de mantenerlo durante cuatro años en el equipo más exitoso de la Champions League de todos los tiempos, cuando el club tuvo múltiples oportunidades para reemplazarlo, significa que el costarricense es merecedor de su puesto. WR

  1. DANI ALVES

Dani Alves jugó como extremo durante su infancia, antes de que su falta de goles convenciera a su padre de hacerlo lateral.

Y a pesar de convertirse en el jugador con más títulos en la historia del fútbol, incluyendo dos títulos de Champions League, su legado es cómo aplicó los atributos de un extremo a un rol defensivo.

Alves fue uno de los primeros fichajes de Pep Guardiola para el Barcelona y pronto se convirtió en un lugarteniente de confianza. Guardiola podía confiar en él para asegurar el lado derecho, alargando el campo para crear espacio para Lionel Messi y Andrés Iniesta, además de para realizar incontables asistencias.

Aunque los laterales ofensivos existían antes de él, actualmente su modelo es seguido por otros jugadores. Pero no muchos de ellos podrán recrear su vitrina de trofeos. AD

  1. OLE GUNNAR SOLSKJAER

El gol ganador de Solskjaer en el minuto 93 contra el Bayern de Múnich es el momento más icónico de la historia de la Champions League.

Su disparo, un golpe de puntera instintivo que es más difícil de lo que parece, no solo hizo que el Manchester United ganara la Champions League, sino también el triplete, un logro que ningún club inglés había conseguido antes, y que ninguno ha conseguido después.

El gol afianzó tanto la leyenda de Solskjaer, (sin la cual no habría tenido la oportunidad de entrenar al United) como la de Sir Alex Ferguson, que vio realizada finalmente su gran ambición de conquistar Europa, y la de Clive Tyldesley, cuya frase «¡Y Solskjaer lo ha ganado!» es un comentario tan icónico que si ves el gol sin escucharlo parece que le falta algo. TB 

  1. PAUL SCHOLES

La volea de 25 yardas contra el Barcelona en 2008 es el gol más emblemático de la Champions League marcado por un jugador del Manchester United que no sea Teddy Sheringham u Ole Gunnar Solskjaer.

Aferrándose a un pase mal colocado, el primer toque de Scholes, imperfecto, fue seguido de un perfecto segundo toque: su bota derecha tocó el balón mientras rebotaba y lo envió lejos de las manos de Víctor Valdés, encajándolo en la esquina superior derecha de la portería.

Este chut llevó al United a la final de la Champions League, que ganaron al derrotar al Chelsea en los penaltis, y le otorgó un momento de redención a Scholes, que se había perdido la final contra el Bayern de Múnich por una suspensión nueve años antes.

Habiendo sido uno de los mejores centrocampistas de la competición durante más de una década, era simple y llanamente lo que merecía el jugador, que entonces tenía 34 años. TB

  1. THIERRY HENRY

Henry ganó la Champions League con el Barcelona en 2009, pero sus mejores momentos en la competición tuvieron lugar sin duda durante su etapa en el Arsenal.

El hat-trick contra la Roma en el Stadio Olimpico en 2002. Los dos goles en la derrota 5-1 del Inter en el San Siro en 2003. Y, por supuesto, el zigzagueante gol ganador en el Bernabéu que eliminó al Real Madrid en 2006.

Tirando de un equipo que contaba con Mathieu Flamini y Emmanuel Eboue hasta la final, esa temporada fue el mayor logro de Henry en la Champions League.

Patrick Vieria había dejado el club, Ashley Cole estaba lesionado durante la mayor parte de la temporada y la implicación de Dennis Bergkamp no era suficiente, a los 36 años.

Así que, mientras los escépticos siempre señalarán el hecho de que Henry nunca marcó en una final importante (una crítica válida), ese empate y la temporada confirman su lugar como un grande de la Champions League. JG

  1. FRANK LAMPARD

Cuando el Chelsea finalmente tuvo en sus manos el trofeo de la Champions League, habiendo disputado antes cuatro semifinales y una final, Lampard era el único jugador en el campo que había estado allí desde el principio.

Era el hombre para aquella gran ocasión, con 15 de sus 23 goles marcados en las fases eliminatorias y un récord personal perfecto en tres tandas de penaltis.

Así que cuando, cuatro años después de aquel infame fallo, John Terry estaba suspendido en la final de 2012 por una expulsión infantil, pareció adecuado que fuera el auténtico talismán europeo de los azules el que llevase el brazalete. TC

  1. DIDIER DESCHAMPS

Antes de que Deschamps se convirtiese en el seleccionador ganador de la Copa del Mundo, fue un capitán ganador de la Champions League.

El más joven de la historia, de hecho.

El francés tenía solo 24 años cuando lideró al Marsella, que continúa siendo el único equipo francés que ha ganado la Champions League, hacia su primer título de esta competición en 1993.

No contento con ello, regresó y la volvió a ganar con la Juventus en 1996.

Junto con Franz Beckenbauer e Iker Casillas, Deschamps es uno de los tres capitanes de la historia del fútbol que ha levantado los trofeos de la Copa del Mundo, la Eurocopa y la Champions League (o Copa de Europa).

Eric Cantona lo apodó «el aguador» debido a su estilo de juego funcional, pero su vitrina de trofeos sugiere que es mucho más que eso. WR

  1. FERNANDO MORIENTES

Morientes ganó la Champions League tres veces en cinco años con el Real Madrid, entre 1998 y 2002, formando parte de una de las parejas de delanteros más formidables de Europa.

Por si Raúl no fuera suficiente, allí estaba él.

Pero la llegada de Ronaldo al Bernabéu en 2002 desplazó a Morientes y finalmente fue cedido al Mónaco un año después.

Sin embargo, él rio el último.

Al enfrentarse a su club anterior en los cuartos de final de la Champions League 2003/04, Morientes le hizo quedar en ridículo.

Marcó dos goles y asistió uno, superando el empate y ayudando al Mónaco a darle la vuelta al déficit de 4-2 de la primera vuelta y venció al Real Madrid por los goles de visitante.

Y no, no se contuvo en su celebración.

Ahí lo tenéis, Galácticos. WR

  1. XABI ALONSO

Habiendo jugado para tres de los equipos más exitosos de Europa, la trayectoria de Alonso en la Champions League debería haber sido mejor.

Después de levantar el trofeo en su primera temporada en el Liverpool, solo ganó otra medalla más, en 2014, cuando estaba suspendido por su último partido como jugador del Real Madrid.

Mientras que él se fue al Bayern, el Real Madrid ganó tres de las cuatro siguientes, dejando a Alonso con seis derrotas en semifinales y un puesto de subcampeón.

Una pena, quizás, pero él sirve como recordatorio de que incluso en una era de superclubs y jugadores increíbles, este trofeo continúa siendo tremendamente difícil de ganar. TC

  1. OLIVER KAHN

Nadie se mete con Oliver Khan.

Su conducta intrépida y sus enormes manos le ganaron el apodo de «el titán» durante su estancia de 14 años en el Bayern de Múnich, cuyo punto álgido fue sin duda la final de la Champions League de 2001 contra el Valencia.

El partido había llegado a los penaltis tras un empate 1-1.

Khan salvó tres tiros y ganó el partido para su equipo, y celebró cada parada con un rugido, cada uno más fuerte que el anterior, haciendo que las venas de su cara parecieran a punto de explotar.

En cualquier caso, teniendo en cuenta su intimidante actitud en el área de penalti, el balón habría estado demasiado asustado para pasar por su lado. WR

  1. ASHLEY COLE

Fue una muestra de respeto que Sir Alex Ferguson eligiese colocar a Cristiano Ronaldo en la izquierda para la final de la Champions League de 2008, en lugar de arriesgarse a que se viera aprisionado por Cole.

El portugués ya había marcado 41 goles con el Manchester United esa temporada y había añadido otro tras sobrepasar al lateral derecho suplente Michael Essien, condenando a Cole al tercer puesto, también llamado «segundo perdedor».

Cuando el Chelsea finalmente ganó el torneo en 2012, fueron los jugadores veteranos los que se llevaron la mayor parte del mérito y, habiendo dirigido una defensa que incluía a Jose Bosingwa, David Luiz y Gary Cahill, nadie realizó más trabajo pesado que Cole. TC

  1. FILIPPO INZAGHI

De los 10 jugadores de nuestra lista que marcaron más de 40 goles en la Champions League, solo Cristiano Ronaldo y Lionel Messi pueden presumir de tener un mejor índice de goles que «Pippo» Inzaghi, lo que no está nada mal para un hombre nacido en fuera de juego.

Sus goles rara vez eran bonitos, aunque siempre los celebraba con énfasis, lo que no quiere decir que otros pudieran haberlos marcado fácilmente.

Su primer gol en la final de 2007, a menudo desestimado como una desviación afortunada, es el mejor ejemplo, dado que Inzaghi simplemente estaba en la trayectoria del tiro libre de Andrea Pirlo tras separarse instintivamente de la barrera para adueñarse de cualquier rebote. TC

  1. GERARD PIQUÉ

Pep Guardiola describió una vez a Pique como su mejor fichaje, aunque es tentador decir que realmente no cuenta como tal.

Orgulloso catalán criado en La Masía, hubo una sensación de casualidad cuando volvió para entrar en el Barcelona (mayormente compuesto por jugadores de la cantera) en 2008, especialmente después de haber ganado sus dos primeras Champions League contra el equipo que estaba dispuesto a dejarle ir por solo 5m £.

Pique se alineó en esos partidos junto a Yaya Touré y Javier Mascherano, centrocampistas de oficio, y para cuando ganó su tercer título contra la Juventus en 2015, era el único defensa que había comenzado las tres finales. TC

  1. PEDRO

Al hacer una lista del gran equipo del Barcelona de 2010/11, Pedro probablemente estaría el último, y no solo porque jugase en el flanco izquierdo del ataque.

El español, que formaba parte del triunvirato «MVP», era el menos imprescindible de los tres. Si bien Lionel Messi y David Villa eran la actuación estelar de la noche, cuando Pedro hacía de telonero era el momento para ir al baño y a por otra cerveza.

Pero una comparación con Messi no favorece a nadie, así que lo justo es considerar los logros de Pedro aisladamente.

Un gol para el mejor equipo de la historia en aquella final de Wembley de 2011 contra el Manchester United, una aparición en otra final victoriosa en 2015, y ser el primer español en marcar en una final de la Champions League, de la Supercopa y de la Copa Mundial de Clubes es algo bueno para los estándares de cualquiera. AD

  1. ARJEN ROBBEN

Toda superestrella necesita un movimiento característico.

Johan Cruyff tenía el «giro de Cruyff», Ronaldinho tenía el «elástico» y Luis Suárez tiene el «morder el brazo del oponente».

Sin embargo, ningún jugador se ha apoyado tanto en su sello personal como Robben.

¿Y por qué no hacerlo? El extremo era prácticamente imposible de parar cuando irrumpía desde el flanco derecho y descargaba un disparo a puerta con la izquierda.

Esta técnica fue la responsable de muchos de sus 31 goles en la Champions League, gran parte de los cuales se marcaron en partidos eliminatorios cruciales para el Bayern.

Y aunque su rudimentario gol ganador en la final de 2013 no fue un clásico disparo de Robben, mostró el carácter implacable y su ojo para el gol que le convirtieron en el extremo invertido por excelencia. JG

  1. LUKA MODRIC

El mayor cumplido que se le puede hacer a Modric es que el Real Madrid de hoy en día, conquistador de Europa, sería imposible sin él.

Pensemos en los numerosos momentos en los que salvó partidos que estaban al límite del desastre.

Por supuesto, otros jugadores más glamurosos se llevaron el mérito, pero la presencia calmada de Modric y de su enfoque de no nunca perder el balón han sido esenciales en cada uno de esos partidos.

Posee un repertorio de pases excelente, puede jugar con ambos pies y ha sido descrito por Predrag Mijatovic como el mejor futbolista de los Balcanes de la historia.

En una ocasión, Jorge Valdano escribió: «Cuando el balón pasa junto a sus pies, el juego fluye como si el fútbol fuera la cosa más fácil del mundo.»

Estas características ayudaron al croata a ser el primer ganador del Balón de Oro desde 2007 que no fuera Lionel Messi ni Cristiano Ronaldo. WR

  1. ANDRIY SHEVCHENKO

Vino por el Milán, se quedó por el Dinamo de Kiev.

Las actuaciones de Sevchenko en el Milán le convirtieron en uno de los mejores delanteros de la Champions League, siendo su gran momento el penalti ganador en la tanda que les dio la victoria contra la Juventus en 2003.

Pero es lo que hizo en el Dinamo de Kiev lo que le separa de otros goleadores icónicos de la competición.

Un año después de marcar un hat-trick en una victoria 4-0 contra el Barcelona en el Camp Nou, Shevchenko fue el mayor goleador de la Champions League en 1998/99 al llevar con sus goles al Dinamo de Kiev a semifinales. Este logro fue impresionante en su momento, pero parece aún mejor 20 años después en la era de los superclubs.

El punto álgido de la campaña del Dinamo de Kiev fue su victoria de 3-1 en el marcador global, eliminado al defensor del título, el Real Madrid, en la ronda de cuartos.

Naturalmente, Shevchenko marcó los tres. TB

  1. KARIM BENZEMA

«La gente juzga a Benzema solo por la cantidad de goles que marca, pero es exigente y leal» ‒ Florentino Pérez (2017).

«Los movimientos inteligentes de Benzema crean el espacio en el que se desenvuelve el máximo goleador del club» ‒ Marca (2017).

«Benzema no marcará 50 goles por temporada, pero me gusta lo que hace por el equipo» ‒ Zinedine Zidane (2017).

«Teníamos un cohete (Bale) y un goleador (Ronaldo), y luego estaba yo, la pieza que hacía que todo funcionase» ‒ Karim Benzema (2019).

Benzema hizo mucho más que servir de apoyo a Cristiano Ronaldo. Pero si eso es por lo que se le recuerda, habiendo ganado cuatro títulos de Champions League y habiendo marcado en la final de 2018, hay legados mucho peores. AD

  1. RYAN GIGGS

Más conocido por su resistencia que por su notable habilidad, es fácil pasar por alto que Giggs realizó contribuciones vitales en los dos triunfos del Manchester United en la Champions League.

Su esfuerzo con el pie izquierdo fue rematado por Teddy Sheringham para igualar el partido contra el Bayern de Múnich en 1999, y también marcó el penalti decisivo en la tanda del United contra el Chelsea nueve años después.

Aquel partido en Moscú, en el que igualó el récord de apariciones en el United establecido por Sir Bobby Charlton, antes de marcar en la tanda de penaltis, fue el mejor ejemplo, no solo de su longevidad, sino de su capacidad para marcar la diferencia. TB

  1. DIDIER DROGBA

Drogba no llega a entrar en el top 20, pero sin duda su puesto en la lista no es una «maldita desgracia».

Las furiosas palabras del marfileño ante la cámara después de que el Chelsea fuese eliminado por el Barcelona en 2009 pudieron haber sido fácilmente su momento más icónico en la competición, pero se superó a sí mismo tres años más tarde.

El Chelsea estaba perdiendo 1-0 frente al Bayern en la final de 2012 cuando Drogba llegó justo a tiempo, como era habitual en su carrera, y marcó un tanto de cabeza en el minuto 89.

Luego se ofreció a tirar el penalti decisivo en la tanda. Un paso. Pum.

Nunca existió la opción de que pudiera fallar. Drogba siempre sabía desenvolverse bajo presión. JG

  1. SERGIO BUSQUETS

Busquets no tiene la clase ni la creatividad de sus compañeros del Barcelona.

Es, en sus propias palabras, ordinario: «estoy en una posición en la que a menudo paso desapercibido. No marco goles ni regateo mucho.»

Por lo que puede parecer extraño que haya conseguido obtener un puesto en el mejor equipo de fútbol de una generación, jugando el partido entero en cada una de las tres finales de la Champions League que ganó el Barcelona entre 2009 y 2015.

En cambio, la genialidad de Busquets reside en la sencillez de sus habilidades: tomar siempre la decisión correcta.

Es un jugador de corte clásico en un equipo de superestrellas internacionales y futbolistas de la era Youtube, pero desempeña un papel fundamental en casi todo lo que sucede en el campo.

En una ocasión, el exseleccionador español Vicente del Bosque dijo sobre él: «Si miras el partido, no ves a Busquets. Pero si miras a Busquets, verás todo el partido.» WR

  1. RONALDINHO

Un movimiento de cadera. Un sutil retroceso del pie. El balón clavándose en la esquina de la portería de Carlo Cudicini.

El golpe de puntera de Ronaldinho en Stamford Bridge es uno de los grandes goles de la Champions League. No solo por su habilidad, que de tan buena es casi absurda, sino porque no habido uno igual desde entonces.

Parece contradictorio que el mejor momento de un maestro de la técnica provenga del patio de la escuela, pero eso era Ronaldinho, el primer futbolista de la era Youtube, que tan a menudo lograba lo impensable.

Las habilidades y los goles del brasileño fueron la obsesión de una generación de jóvenes aficionados del fútbol, y su «reto del larguero» en el anuncio de Nike fue el primer vídeo en alcanzar un millón de reproducciones.

Ese vídeo había sido editado en gran medida, pero era difícil darse cuenta, teniendo en cuenta que la mayoría de sus goles parecían ser producto de un truco de la cámara. JG

  1. MARCELO

¿Es posible ser considerado el mejor jugador del mundo en tu posición y estar infravalorado al mismo tiempo?

Ejemplo concreto: Marcelo.

Si bien el brasileño lideraría las listas de mejores laterales izquierdos de la mayoría de los aficionados, su influencia en las cuatro victorias del Real Madrid en la Champions League se sigue pasando por alto.

Ya fuera marcando el tercer gol de la final del 2014 contra el Atlético o con una excelente actuación frente al Bayern en los cuartos de final de 2017, Marcelo fue tan consistentemente brillante durante aquel periodo de cinco años lleno de trofeos como cualquier otro jugador del Real Madrid.

Los percances defensivos que plagaron sus primeros años en el Bernabéu son ahora mucho más escasos. El jugador, de 31 años, ahora puede hacerlo todo: desdoblamientos por fuera y por dentro, pases cruzados y entradas.

En 2012 fue nombrado heredero de Roberto Carlos... Por el propio Roberto Carlos.

Y hablando de él… JG

  1. ROBERTO CARLOS

Probablemente, no habría un Marcelo si no hubiese habido antes un Roberto Carlos.

Es fácil recordar al antiguo Galáctico por sus tiros libres, y con razón, ya que, a finales de los 90, todo joven aficionado intentó, por lo menos una vez, emular su combinación única de potencia y elegancia.

Sin embargo, lo que realmente diferencia a Roberto Carlos de sus equivalentes actuales es que en su tiempo simplemente no había nadie como él.

Fue uno de los jugadores más emocionantes del mundo, a pesar de jugar en una posición que no estaba de moda.

A diferencia de otros grandes laterales de la época, como Paolo Maldini o Lilian Thuram, la forma de jugar de Roberto Carlos podría trasladarse perfectamente a la manera de funcionar de los equipos en 2019.

Hay muchos imitadores de Marcelo en el fútbol actual. Pero solo ha habido un Roberto Carlos. JG

  1. CARLES PUYOL

A quien madruga Dios le ayuda, y quizás por eso recompensó a Carles Puyol con tres títulos de la Champions League.

Consciente del intimidante nivel que había a su alrededor en el Barcelona, Puyol entrenaba horas extra para compensar sus limitaciones técnicas, antes de ir al gimnasio para asegurarse de que superaría los retos físicos en los que a menudo se involucraba.

Como resultado, añadió músculo y vigor a un Barcelona que generalmente se abría paso hasta la victoria.

Y cuando el equipo necesitó su liderazgo, le fue fácil proporcionárselo. Frank Rijkaard, exentrenador del Barça, dijo en una ocasión que podría reemplazar al español como corazón de la defensa, pero no como corazón del equipo. 

«Soy como el estudiante que no es tan listo, pero estudia para los exámenes y al final le salen bien», comentó Puyol sobre sí mismo.

El capitán no decepcionaba con su rendimiento, pero esta visión comedida que tenía de sí mismo resume su contribución al Barcelona. AD

  1. STEVEN GERRARD

Si la noche del 25 de mayo de 2005 fue la que creó las leyendas del Liverpool, entonces Steven Gerrard debería ser nombrado santo patrón de Anfield.

Ya había realizado actos heroicos para conseguir que su equipo superase la fase de grupos en el primer puesto, estuvo a punto de romper la red con un gol decisivo contra el Olympiakos en una de aquellas noches.

Pero el «chico local» convertido en capitán reescribió la lógica del fútbol una vez más al liderar a su equipo en una de las remontadas más extraordinarias que jamás haya visto este deporte.

Llegaron al descanso perdiendo cero a tres contra el AC Milán, no había esperanza.

Pero en los nueve primeros minutos de la segunda parte, el cabeceo de Gerrard que superó a Dida le dio al Liverpool la fe que necesitaba.

En seis minutos, estaban empatados.

En una hora, eran campeones de Europa por primera vez en 21 años.

Hermoso. WR

  1. KAKÁ

Un movimiento en el minuto 44 de la final de la Champions League de 2005 coloca a Kaká en este top 50 por sí solo.

Al sobrepasar con una pirueta al futuro héroe Steven Gerrard y colocar el balón a Hernán Crespo para que marcara gol desde su propio campo, estaba ejecutando uno de los grandes momentos de la final europea. Que hiciera a Jamie Carragher estirarse y deslizarse en un imposible intento de pararlo es el broche de oro de este pase.

La actuación resumió la magia de Kaká como el mejor centrocampista del mundo de mediados a finales de los 2000.

En términos modernos, combinó la brutal eficiencia de Kevin de Bruyne con la estética de Luka Modric o Miralem Pjanic.

Tuvo más que mostrar en la competición de 2006/07, en la que destruyó al Celtic y al Manchester United de camino a ser el mayor goleador del torneo, y obtuvo el reconocimiento de la UEFA como mejor delantero del año y como Futbolista de Club del Año, y el Balón de Oro. AD

  1. CLARENCE SEEDORF

«¿Este tío es un gánster? Su nombre real es Clarence.»

Como bien explicó B. Rabbit, el personaje de Eminem en la película 8 Millas, Clarence es un nombre terrible para un rapero de Detroit.

Sin embargo, para uno de los mejores organizadores de la Champions League, es perfecto.

El nombre es elegante y sofisticado, como el propio Seedorf.

El holandés ganó la competición cuatro veces (solo Ronaldo la ha ganado más veces) y continúa siendo el único jugador que lo ha hecho en tres clubes diferentes: Ajax, Real Madrid y AC Milan. TB

  1. EDWIN VAN DER SAR

Alex Turner cantó en la canción de los Arctic Monkeys The View From the Afternoon: «la anticipación tiene la costumbre de llevarte a la decepción.»

No para Edwin van der Sar, que estaba tan seguro de poder salvar el penalti de muerte súbita de Nicolas Anelka en la final de 2008 en Moscú que sonreía antes de que lo hubiera parado siquiera.

Asegurar la Champions League para el Manchester United fue el mejor momento del holandés en la Champions League, y uno de los que su carrera se merecía.

La de Moscú fue su segunda victoria, había ganado con el Ajax 13 años antes. También acabó como subcampeón en otras tres finales, y jugó por última vez como profesional en el partido de 2011 en Wembley, que finalizó con la derrota del United. TB

  1. ZINEDINE ZIDANE

Una victoria en la Champions League quizás es un botín algo decepcionante para un jugador tan emblemático como Zidane.

Pero ¡qué gran victoria!

La final de 2002 siempre será recordada por una cosa: el gol ganador de Zizou, el mejor gol jamás marcado en la Champions League.

Con el pase cruzado de Roberto Carlos cayendo desde una altura imposible, el francés rotó y realizó una volea perfecta con su pie débil que acabó en la esquina superior de la portería.

Pero, si bien Zidane fue siempre capaz de crear momentos de genialidad total, fue venerado por sus compañeros por su habilidad para controlar el juego.

«Cuando Zidane saltaba al campo, los otros 10 jugadores se volvían mejores de pronto», dijo Zlatan Ibrahimovic sobre la leyenda francesa.

Su éxito como entrenador hace fácil olvidar lo buen jugador que era. Era un auténtico centrocampista completo.

Y ahora, si no os importa, voy a ver esa volea otras 100 veces más. JG

  1. SAMUEL ETO’O

Eto’o debió sentirse muy satisfecho tras ganar la Champions League con el Inter de Milán en 2010.

Un año antes, Pep Guardiola lo había sacado del Barcelona, a pesar de haber jugado un papel especial en la victoria en dicha competición (marcando en la final contra el Manchester United) justo unas semanas antes.

El triunfo de Eto’o con el Inter fue su tercera victoria en la Champions, todas ellas en un periodo de cinco temporadas.

La primera fue con el Barcelona en 2006: marcó el gol del empate en la final contra el Arsenal, estando Jens Lehman expulsado por una falta contra él, lo que redujo sus oponentes a 10.

Otros delanteros marcaron más goles en la competición, pero pocos tuvieron tanto impacto en ella como Eto’o. TB

  1. GARETH BALE

Si Gareth Bale hubiese tenido en otro equipo la carrera en la Champions League que ha tenido en el Real Madrid, sin duda el Madrid habría querido ficharle.

A Bale se le podría acusar de solo ser capaz de aportar mediante arranques y explosiones.

Pero cualquiera aceptaría dos de esos arranques y explosiones siempre que acabaran en goles ganadores en la final, incluyendo el que probablemente sea el mejor gol ganador de esta competición: cuando en 2018 se hizo con la pelota de espaldas y superó acrobáticamente a Loris Karius desde fuera del área.

Su historia europea comienza con el hat-trick contra el Inter de Milán en el San Siro en octubre de 2010, una actuación brutal e ilógica de un jugador que se suponía que debía haber dejado el Spurs por el Nottingham Forest meses antes.

Tres años más tarde, estaba de camino a marcar seis goles en ocho comienzos mientras ganaba la competición por primera vez.

Estas oleadas de individualismo le llevaron a ser comparado con Cristiano Ronaldo, pero Bale nunca buscó eso.

Aunque una comparación que sí le agradaría sería con Zinedine Zidane. En nuestra lista, Bale está tres puestos por encima de su némesis y entrenador actual. AD

  1. XAVI

«Estoy seguro de que nunca le he visto perder el balón una sola vez».

Sir Alex Ferguson hablaba solo medio en broma. Pero cuando Xavi mareó al Manchester United hasta la sumisión en la final de la Champions League de 2011 en Wembley, podemos imaginarnos que se dijeron esas mismas palabras, por pura exasperación.

Xavi era conocido como «el titiritero» en aquel icónico trío de centrocampistas, junto con Sergio Busquets y Andrés Iniesta. No solo podía controlar el juego, encontrando espacios para recibir el balón que nadie sabía que existían, sino que podía confundir a sus oponentes con su eficiente uso del balón.

Varias de las jugadas maestras de Lionel Messi fueron contra defensas cuyos cerebros ya habían quedados aturdidos por Xavi.

Extrañamente, tuvieron que pasar varios años para que recibiera gran reconocimiento. Fue criticado por realizar solo pases laterales y apoyarse en la genialidad de sus compañeros hasta que Guardiola tomó el mando del Barça y España comenzó su monopolio sobre el fútbol internacional en 2008.

Retirarse con tres Champions League en su haber asegura que Xavi será finalmente recordado por frustrar a Ferguson y varios otros de maneras muy diferentes. AD

  1. IKER CASILLAS

El portero con el puesto más alto de esta no lista no podía ser otro.

Casillas tiene el récord de participaciones en la historia de la Champions League, aunque esto no es una sorpresa debido a su longevidad en lo más alto de este deporte.

Se convirtió en el portero más joven en jugar y ganar una final de la Champions League después de la victoria 3-0 del Real Madrid sobre el Valencia en el 2000, con solo 19 años.

Catorce años más tarde, capitaneó a su equipo hasta la Décima.

Ese fue su primer trofeo europeo desde que derrotaran al Leverkursen en 2002 con aquella volea de Zidane, e inauguró una era de éxito sin precedentes en la Champions League para el Real Madrid.

Fue nombrado Mejor Portero del Mundo cada año entre 2008 y 2012 y es, según Gianluigi Buffon, «el mejor de mi época».

Eso es suficiente para mí. WR

  1. PAOLO MALDINI

Maldini ya había ganado la antigua Copa de Europa dos veces antes de que cambiara de nombre en 1992, lo cual parece apropiado para el defensa más atemporal de la Champions League.

Durante los siguientes 15 años, jugó en seis finales más para el AC Milán, alternando entre el puesto de lateral izquierdo y centrocampista.

De estas finales, ganó tres, dos como capitán, y fue nombrado hombre del partido contra la Juventus en 2003 en la única final con resultado 0-0.

Y, para culminarlo, lo hizo mientras parecía salido de una película de Federico Fellini, leyendo el periódico en alguna tranquila plaza italiana mientras el bullicio del mundo giraba frenéticamente a su alrededor. TC

  1. RAÚL

Era «el chico» antes de que llegaran los demás.

Es difícil de creer hoy en día, pero hubo un tiempo antes de que Lionel Messi y Cristiano Ronaldo llegaran del espacio exterior y arruinaran el fútbol para todo aquel que ha jugado alguna vez contra ellos.

No, de verdad.

En aquel tiempo, era Raúl el que dejaba el listón alto con cifras ridículas.

Descrito por Pep Guardiola como «el jugador más importante de la historia del fútbol español», marcó 72 goles en 142 participaciones en la Champions League.

Era el jugador que fingías ser en el patio de la escuela y cuyo nombre querías en tu espalda.

En una ocasión dijo: «Creo que empecé a jugar al fútbol antes de nacer.»

Si alguna vez lo viste en el campo, esto no parece tan disparatado como pueda sonar en un primer momento. WR

  1. ANDRÉS INIESTA

Es imposible habar de Andrés Iniesta sin pensar inmediatamente en su gol ganador en el tiempo añadido contra el Chelsea en la semifinal de 2008/09 en Stamford Bridge.

El balón lateral cruzado procedente de Messi, el preciso golpe con el exterior del pie que acabó en la esquina superior de la portería, la celebración quitándose la camiseta, su camiseta térmica amarilla debajo.

¿He mencionado que golpeó con el exterior del pie? Puro espectáculo.

Pero fijarse en un momento específico sería hacer de menos la carrera de uno de los mejores jugadores en uno de los equipos con más talento que se recuerdan.

La genialidad de Iniesta solía venir de algo menos tangible que momentos de gracia.

No realizó una gran cantidad de goles o asistencias, pero no importaba. Era más importante cómo jugaba, el tempo que llevaba.

Si la inteligencia en el campo se midiera mediante coeficiente intelectual, Iniesta sería el equivalente futbolístico de Stephen Hawking. WR

  1. SERGIO RAMOS

Ha habido muchos jugadores mejores que Ramos en la Champions League, pero pocos han tenido tanto impacto.

El capitán del Real Madrid encarnó al equipo que ganó la competición cuatro veces entre 2014 y 2018.

En pocas palabras: es crucial.

Fue Ramos el que marcó dos goles de cabeza en cuatro minutos en la demoledora semifinal de 2014 contra el Bayern.

Fue su gol del empate en el minuto 93, que forzó el tiempo extra en la final de aquel año, acabando en la victoria 4-1 que completó la Décima.

También fue él quien marcó el único gol de su equipo en la final de 2016, cuando el Madrid venció al Atlético en la tanda de penaltis.

Lesionar a Mohamed Salah y propinar un codazo a Loris Karius poco antes de que el portero del Liverpool cometiera su primer error en la final de 2018 fueron dos hechos que sellaron la reputación de juego sucio de Ramos, y ninguna valoración de su carrera puede estar completa sin mencionar su uso de las malas artes.

Sin embargo, el español es mucho más que un simple tramposo o matón.

Es un jugador fantástico y (aparte de los dos jugadores que se encuentran sobre él en la lista) es la fuerza de voluntad más dominante en la historia de esta competición. JG

  1. LIONEL MESSI

La discusión a la hora de elegir entre Messi y Ronaldo ha definido el fútbol durante más de una década, así que, naturalmente, nuestra lista también llega a eso.

Finalmente, la decisión no era tan difícil.

El número de Champions League ganadas (3) y goles marcados (112) es increíble, pero inferior al del hombre que se encuentra por encima de él (o, en esta lista, debajo). También es innegable que al Barcelona no le ha ido bien en la Champions League desde que se hicieran con el título en 2015.

Pero, como se suele decir, podemos disfrutar de los dos.

Desde su debut en esta competición a los 17 años, Messi ha hecho cosas con el balón que no tienen parangón.

Los cuatro goles contra el Arsenal en 2010, el regateo y el gol en el Bernabéu en 2011. Y el broche de oro, la sinuosa forma de evadirse de Jerome Boateng y la manera en la que superó a Manuel Neuer, que es el momento deportivo sobre el que más se tuiteó en 2015 y el gol de la temporada según la UEFA.

Cuando ninguno de tus goles en las finales de la Champions League son el punto álgido de tu carrera, algo va bien.

Estas palabras no le hacen ni la mitad de justicia que merece, ¿pero qué palabras podrían? El mejor de todos los tiempos no es el mejor de todos los tiempos de la Champions League, pero es imposible imaginarse que pudiera haber llegado más cerca. AD

  1. CRISTIANO RONALDO

Ronaldo es, sin ninguna duda, el mejor jugador de la Champions League, un logro extraordinario dado que ha jugado al mismo tiempo que el mejor jugador de este deporte, Lionel Messi.

A diferencia de una temporada de liga, donde el mejor equipo siempre gana, el resultado de fútbol eliminatorio se ve más influido por contribuciones individuales. Los jugadores pueden controlar el juego a su antojo, y ningún jugador lo ha hecho de forma más contundente ni habitual que Ronaldo, cuyos cinco títulos de Champions League son lo máximo que ha conseguido ningún jugador.

Habiendo conseguido su primera victoria con el Manchester United en 2008, el portugués es la razón por la cual un buen Real Madrid (pero no un genial Real Madrid) ganó cuatro veces entre 2013 y 2018.

Ronaldo es tanto el mayor goleador de la competición (ha marcado 126, de los cuales más de la mitad han sido en partidos eliminatorios) como el artífice de algunos de los mejores goles: el cabeceo intrépido frente al Roma (2008), el cohete de 40 yardas frente al Porto (2009) y el contrataque frente al Arsenal (2009).

Increíblemente, ninguno de estos goles fue designado gol de la temporada de la Champions League, un premio que ha ganado tres veces: el tiro elevado frente al Liverpool (2014), el extravagante tiro sobre la cabeza frente a la Juventus (2017) y la volea por encima del hombro contra el Manchester United (2018).

Si no recuerdas todos ellos, no te preocupes. Ronaldo, el mejor de todos los tiempos de la Champions League, hace ordinario lo extraordinario. TB