A sus 26 años, el delantero argentino (Rosario, 9-3-1985) viene saboreando su momento más dulce desde que en el 2014 el Atlético de Madrid se hiciese con sus servicios. Lleva tres goles en las dos primeras jornadas del campeonato doméstico (150 minutos), los cuales le sirven para liderar la clasificación de máximo anotador junto a Vinicius Jr y Erik Lamela, y han valido para que los colchoneros, actuales campeones, sigan encabezando la tabla clasificatoria (6 puntos, 3 goles a favor y 0 en contra)

Tres tantos que ha marcado después de tres disparos intentados. Es decir, arrastra una “efectividad máxima”, del 100% en lo que va de LaLiga, que sostiene la tónica con la que el rosarino acabó el pasado curso, y que contrasta con los momentos de la pasada campaña en los que estuvo en el disparadero por fallos en el cara a cara con el portero justo cuando el Atlético más necesitaba de sus goles.

Estuvo algo más de tres meses sin mojar, pero el Cholo Simeone jamás perdió la confianza en él (actuó en los 38 choques del pasado curso), y desde que ante el Eibar hiciese un doblete (el pasado 18 de abril), el futbolista acumula 7 tantos en 10 partidos de La Liga.

Así, y desde entonces, viene precisando de una media de 2.6 tiros para perforar la red adversaria, lo que le convierte en uno de los delanteros de Europa que, hoy en día, necesita de una menor cantidad de disparos para degustar el néctar del gol.

Se ha quitado la etiqueta de revulsivo ahora que juega más alejado de la banda, aunque sigue siendo un jornalero del gol, pues no ha perdido la humildad y el esfuerzo infatigable que sedujeron al Cholo Simeone desde su llegada. Un compromiso que le ha llevado a ir mejorando sus números paulatinamente, año a año. Sin estridencias.

En este sentido, la temporada pasada fue la campaña en la que más goles anotó en LaLiga (9 – 1.4 tiros a puerta por partido) y en la que más partidos disputó: 38, 29 de ellos como titular. También fue fundamental en la creación, dado que repartió 9 asistencias y tuvo un porcentaje de acierto en el pase del 80 por ciento.

Con todo esto, parece que Ángel Correa se encuentra en el mejor momento de su carrera. Maduro y comprometido, el internacional con Argentina (15 partidos y 2 goles con la albiceleste) quiere seguir engordando sus guarismos y ayudar al Atlético con su producción ofensiva, la cual asciende, a fecha de hoy, a 49 goles en 282 partidos con la elástica rojiblanca.

¿Será esta su temporada más prolífica desde que recalase en la entidad madrileña?

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