La precariedad del entrenador en España
Cada año, en los primeros meses cae algún míster, pero este año podríamos ver hasta cinco ceses en menos de dos meses.
Fran Escribá (Celta de Vigo)
Llegó hace solo 6 meses a Vigo con la misión de salvar a un club con aspiraciones europeas de un posible descenso que nadie preveía. Y con la inestimable ayuda de Iago Aspas, lo consiguió. Este verano el Celta volvió a despertar la ilusión de su parroquia con fichajes de renombre (Mina, Rafinha, Denis…), pero del sueño se ha pasado a la pesadilla de la 18/19. Los vigueses han arrancado en La Liga con solo 6 puntos de 21 posibles, y la sensación de tener equipo para mucho más. Escribá se juega el domingo 3 puntos, y probablemente su puesto de trabajo.
David Gallego (RCD Espanyol)
Tras la marcha de Rubí, el EuroEspanyol confió en un entrenador de la casa para una temporada que debía ser para disfrutar de la vuelta a la Europa League más de una década después. Sin embargo, tras las marchas de Mario Hermoso y Borja Iglesias, Gallego no da con la tecla de un Espanyol ya en descenso, y la afición perica ya ha pedido su cabeza. La directiva, mientras tanto, muestra su apoyo públicamente, pero esto suele ser solo el anticipo de un cese.
Rubí (Real Betis)
Una vez conseguido el hito de llevar al Espanyol a Europa, este verano cogía los mandos de un eterno aspirante a convertirse en un equipo puntero de La Liga, el Betis. Con grandes fichajes como Borja Iglesias y Nabil Fekir, sumados a los Canales, Joaquín, Bartra, Loren, Tello… están llamados, un año más, a dar el salto a Europa. Y un año más, los verdiblancos no están a la altura de sus aspiraciones. En solo 7 partidos han recibidos dos "manitas", encajando un total de 15 goles, y sumando solo 2 victorias en lo que va de curso. Rubí sigue con margen de fallo, pero la afición bética no es de las que da muchas oportunidades, y menos cuando ve la calidad y los millones que hay sobre el campo.
Mauricio Pellegrino (CD Leganés)
Segunda temporada del argentino en el banquillo pepinero. Tras una salvación holgada en su primera temporada, Pellegrino afrontaba un segundo año con un proyecto más asentado, y una inversión de 20M en fichajes. Pero la temporada no ha empezado nada bien para el Leganés: colistas, 2 puntos de 21, 0 victorias y solo 3 goles a favor hacen que el crédito ganado por Pellegrino se vaya agotando.